domingo, 26 de mayo de 2013



Comunicación efectiva

Tener buena comunicación es la clave para tener éxito en cualquier área de nuestra vida. Muchas personas piensan tener la habilidad de comunicarse de forma efectiva por lo que se convierte en una frase muy usada y poco entendida. Se da por entendido que la comunicación es simplemente un intercambio de palabras cuando en realidad es mucho más que eso; ser un buen comunicador es parte de nuestra personalidad e influye también el proceso de socialización vivido desde nuestra niñez.

Además de expresar ideas o transmitir un mensaje claro, comunicarse requiere de habilidades tales como adaptarse a diferentes situaciones, leer el comportamiento de quien nos escucha, evitar y resolver conflictos, ser empatico para saber como nos están interpretando los demás y tener cierto grado de compromiso y tolerancia para llegar a acuerdos. Conociendo así la comunicación, no es tan fácil como creemos.

Como todo en nuestra forma de vida, la personalidad define bastante que tan buenos comunicadores somos. Se dice que la mujer tiene mayor habilidad de expresión, especialmente porque tendemos a desarrollar mejor nuestra inteligencia emocional. El libro de Dubrin hace referencia al comparar los patrones de comunicación de los hombres y las mujeres, siendo estas mas empaticas, simpáticas, conciliadoras en cuanto a diferencias y menos dominantes, entre otros (Dubrin, 2008). Claramente se evidencian los aspectos de nuestra personalidad al comunicarnos, en este caso ligadas al género.

Por ultimo quisiera agregar, que el saber comunicarse efectivamente esta condicionado también al proceso de socialización por el cual fuimos expuestos. Desde niños empezamos a desarrollar destrezas sociales que vamos adquiriendo por medio de la observación. La familia, la escuela, la sociedad influyen (Castro, 2000); así por ejemplo si vemos el rol de la mujer sumisa, a la cual no se le permite expresar con libertad, o al niño que no se le permite expresar emociones o sentimientos porque “no es de hombres”, muy probablemente lo adaptemos y esto afectara de alguna forma nuestra forma de comunicarnos.

En conclusión, la comunicación es vital para relacionarnos con los demás, por eso debemos informarnos, educarnos y crear la necesidad de mejorar los aspectos que ocupemos para hacerlo efectivamente.


























Referencias:
Castro Montero, Silvia. (2000) Introducción al pensamiento crítico. San José: ULACIT.
 Dubrin, Andrew. (2008) Relaciones Humanas. México: Pearson Education.
López, Félix. (1985) La Formación de vínculos sociales. Madrid: Servicio de Publicaciones del Ministerio de Educación y Ciencias.