Comunicación
efectiva
Tener buena comunicación es la clave para tener éxito
en cualquier área de nuestra vida. Muchas personas piensan tener la habilidad
de comunicarse de forma efectiva por lo que se convierte en una frase muy usada
y poco entendida. Se da por entendido que la comunicación es simplemente un
intercambio de palabras cuando en realidad es mucho más que eso; ser un buen
comunicador es parte de nuestra personalidad e influye también el proceso de socialización
vivido desde nuestra niñez.
Además de expresar ideas o transmitir un mensaje claro,
comunicarse requiere de habilidades tales como adaptarse a diferentes
situaciones, leer el comportamiento de quien nos escucha, evitar y resolver
conflictos, ser empatico para saber como nos están interpretando los demás y
tener cierto grado de compromiso y tolerancia para llegar a acuerdos. Conociendo
así la comunicación, no es tan fácil como creemos.
Como todo en nuestra forma de vida, la personalidad
define bastante que tan buenos comunicadores somos. Se dice que la mujer tiene
mayor habilidad de expresión, especialmente porque tendemos a desarrollar mejor
nuestra inteligencia emocional. El libro de Dubrin hace referencia al comparar
los patrones de comunicación de los hombres y las mujeres, siendo estas mas
empaticas, simpáticas, conciliadoras en cuanto a diferencias y menos dominantes,
entre otros (Dubrin, 2008). Claramente se evidencian los aspectos de nuestra
personalidad al comunicarnos, en este caso ligadas al género.
Por ultimo quisiera agregar, que el saber comunicarse
efectivamente esta condicionado también al proceso de socialización por el cual
fuimos expuestos. Desde niños empezamos a desarrollar destrezas sociales que
vamos adquiriendo por medio de la observación. La familia, la escuela, la
sociedad influyen (Castro, 2000); así por ejemplo si vemos el rol de la mujer
sumisa, a la cual no se le permite expresar con libertad, o al niño que no se
le permite expresar emociones o sentimientos porque “no es de hombres”, muy
probablemente lo adaptemos y esto afectara de alguna forma nuestra forma de
comunicarnos.
En conclusión, la comunicación es vital para
relacionarnos con los demás, por eso debemos informarnos, educarnos y crear la
necesidad de mejorar los aspectos que ocupemos para hacerlo efectivamente.
Referencias:
Castro Montero, Silvia. (2000) Introducción
al pensamiento crítico. San José: ULACIT.
Dubrin, Andrew. (2008) Relaciones Humanas. México: Pearson
Education.
López, Félix. (1985) La Formación
de vínculos sociales. Madrid: Servicio de Publicaciones del Ministerio de Educación
y Ciencias.